Las terrazas evitan las concentraciones de gente dentro de los locales. Con las nuevas restricciones, el uso del interior de los locales queda limitado en algunos casos hasta el 50% del aforo; por ello, una terraza nos puede ayudar a compensar el defecto de aforo. Además, los científicos advierten que el riesgo de transmisión es hasta 20 veces menor en el exterior.
Las terrazas son, pues, un lugar clave para que los locales de la hostelería sigan resistiendo el golpe económico y puedan mantener parte de su actividad. Y también un gran atractivo para la clientela, que quiere seguir disfrutando de nuestros servicios. Además, una de las ventajas que tenemos en muchas zonas de España es que las temperaturas bajan en invierno y otoño, pero a niveles todavía tolerables para seguir “expuestos” en la calle.
Su terraza «habla» de su negocio
Son también un factor estético a tener en cuenta; dicen mucho del lugar o negocio al que pertenecen. Lo perfecto es que, por supuesto, protejan al cien por cien, pero integrándose perfectamente en el entorno.
Hay que hacer de tu terraza un sitio acogedor, puesto que es la tarjeta de visita de nuestro establecimiento. El cliente debe sentir que está dentro de tu restaurante (y no en la calle), y esto se logra con la ambientación. Jardineras y separadores son perfectos para esta integración. Lo más importante es que las personas se sientan cómodas y como si estuvieran en casa.
Los cerramientos de terraza para hostelería se transforman en un factor decorativo más. Le dará a tu terraza un aspecto único y también incomparable. Además, se puede personalizar estos cerramientos con el nombre del restaurante o bien el color que se desee.